14 Ética: moralidad del Estado

La teoría del contrato social (Rousseau) está errada.

La moralidad de los contractualistas son los intereses estatales. Es bueno todo lo que sirve para conservar, exaltar y consolidar el poder del Estado, siendo nulos los intereses de los otros Estados, en detrimento de la libertad interna y la justicia externa.

Así, la guerra es la ley suprema para todo Estado que quiera ser el más poderoso.

El patriotismo es el supremo derecho y la mayor virtud del Estado, constituyéndose en una flagrante negación de la humanidad. Todo crimen cometido en nombre del Estado y por patriotismo es un deber y una virtud.

Los Estados, aparentemente, rinden pleitesía a la idea de humanidad, pero la violan todos los días.

Se prohíbe al individuo lo que se autoriza al Estado (Maquiavelo). Por tanto el crimen es la condición esencial de la existencia del Estado y él sólo detenta su monopolio.

Teología y política: ciencia de la Iglesia y teoría del Estado respectivamente.

Ambas coinciden en que es necesario sacrificar la libertad humana porque todos los hombres son malos y abandonados a su libertad natural se destruirían. Debe haber una guía, un jefe, una autoridad para guiar al pueblo.

Estado: mal históricamente necesario como la religión que puede ser vencida por medio de la rebelión ante la autoridad.