CAPÍTULO CV.
1. En aquellos días, el Señor (les) ordenó que convocaran y testificaran a los hijos de la tierra acerca de su sabiduría: Mostrádsela; porque vosotros sois sus guías, y una recompensa sobre toda la tierra. 2. Porque Yo y Mi Hijo estaremos unidos con ellos para siempre en los caminos de la rectitud en sus vidas; y tendréis paz: gozaos, hijos de la rectitud. Amén.