A LA NOCHE.

Cubriste ya la tierra con tu velo

¡Oh noche de mi mal consoladora!

Tu calma y tu silencio el alma adora

Pues tregua ofrecen á mi triste duelo.

Radiante cruza el azulado cielo,

Seguido de su corte encantadora

El astro del amor, miéntras la aurora

Vuelve á lucir y á renovar mi anhelo.

Ah! si tus horas prolongar pudiera,

¡Cuán dichoso y feliz me sentiría!

¡Qué dulce el curso de mi vida fuera!

Odio la luz del esplendente día

Porque al brillar en la celeste esfera

El sol alumbra la tristeza mia.