Tened hoy una buena desconfianza vosotros, hombres superiores, los de corazón abierto. ¡Ustedes, los de corazón abierto! ¡Y mantened en secreto vuestras razones! Porque este día es el de la chusma.
Lo que la chusma aprendió a creer sin razones, ¿quién podría refutárselo con razones?
Y en el mercado se convence con gestos. Pero las razones hacen que la chusma desconfíe.
Y cuando la verdad haya triunfado una vez allí, entonces preguntaoscon buena desconfianza: "¿Qué fuerte error ha luchado por ella?"
¡Ponte en guardia también contra los eruditos! Te odian, porque son improductivos. Tienen ojos fríos y marchitos ante los que todo pájaro queda sin plumas.
Tales personas se jactan de no mentir: pero la incapacidad de mentir está aún lejos de ser el amor a la verdad. ¡Estáte atento!
¡La libertad de la fiebre está todavía lejos de ser un conocimiento! No creo en los espíritus refrigerados. Quien no sabe mentir, no sabe lo que es la verdad.