VII

Ríñeme vuesamerced porque no he vuelto á su casa; y es porque no he vuelto en mí de las visiones que vi el otro dia. Señora mia, por curiosidad se puede ir á su casa, mas no por amor porque se ven en ella todas las naciones, lenguas y trajes del mundo. Qué figura quiere vuesamerced que haga un estudiantón entre Julios y Otavios, hablando dineros y escupiendo reales? Pues entre todas las naciones, solo el pobre es el extranjero, y há menester ser un mohatron para que le entiendan esos señores. En conclusión, yo estaba como vendido y vuesamerced como comprada. Y aunque pienso que dejan holgar á vuesamerced por mis barrios, no me tengo por tan seguro en casa donde la sombra de un extranjero se encaja encima.

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