Entre PEDRO, lacayo de LAURENCIO.- [LAURENCIO.]
PEDRO: ¡Qué necio andaba en buscarte
fuera de aqueste lugar! 650
LAURENCIO: Bien me pudieras hallar
con el alma en otra parte.
PEDRO: Luego, ¿estás sin ella aquí?
LAURENCIO: Ha podido un pensamiento
reducir su movimiento 655
desde mí, fuera de mí.
¿No has visto que la saeta
del reloj en un lugar
firme siempre suele estar
aunque nunca está quïeta, 660
y tal vez está en la una,
y luego en las dos está?
Pues, así mi alma ya,
sin hacer mudanza alguna
de la casa en que me ves, 665
desde Nise que ha querido,
a las doce se ha subido,
que es número de interés.
PEDRO: Pues, ¿cómo es esa mudanza?
LAURENCIO: Como la saeta soy, 670
que desde la una voy
por lo que el círculo alcanza.
¿Señalaba a Nise?
PEDRO: Sí.
LAURENCIO: Pues ya señalo en Finea.
PEDRO: ¿Eso quieres que te crea? 675
LAURENCIO: ¿Por qué no, si hay causa?
PEDRO: Di.
LAURENCIO: Nise es una sola hermosa,
Finea las doce son:
hora de más bendición,
más descansada y copiosa. 680
En las doce el oficial
descansa, y bástale ser
hora entonces de comer,
tan precisa y natural.
Quiero decir que Finea 685
hora de sustento es,
cuyo descanso ya ves
cuánto el hombre le desea.
Denme, pues, las doce a mí,
que soy pobre, con mujer 690
que, dándome de comer,
es la mejor para mí.
Nise es [ah]ora infortunada,
donde mi planeta airado,
de sextil y de cuadrado 695
me mira con frente armada.
Finea es [ah]ora dichosa,
donde Júpiter benigno
me está mirando de trino,
con aspecto y faz hermosa. 700
Doyme a entender que, poniendo
en Finea mis cuidados,
a cuarenta mil ducados
las manos voy previniendo.
Esta, Pedro, desde hoy 705
ha de ser empresa mía.
PEDRO: Para probar tu osadía,
en una sospecha estoy.
LAURENCIO: ¿Cuál?
PEDRO: Que te has de arrepentir
por ser simple esta mujer. 710
LAURENCIO: ¿Quién has visto de comer,
de descansar y vestir
arrepentido jamás?
Pues esto viene con ella.
PEDRO: A Nise, discreta y bella, 715
Laurencio, ¿dejar podrás
por una boba inorante?
LAURENCIO: ¡Qué inorante majadero!
¿No ves que el sol del dinero
va del ingenio adelante? 720
El que es pobre, ése es tenido
por simple; el rico, por sabio.
No hay en el nacer agravio,
por notable que haya sido,
que el dinero no lo encubra; 725
ni hay falta en naturaleza
que con la mucha pobreza
no se aumente y se descubra.
Desde hoy quiero enamorar
a Finea.
PEDRO: He sospechado 730
que a un ingenio tan cerrado
no hay puerta por donde entrar.
LAURENCIO: Yo sé cuál.
PEDRO: ¡Yo no, por Dios!
LAURENCIO: Clara, su boba criada.
PEDRO: Sospecho que es más taimada 735
que boba.
LAURENCIO: Demos los dos
en enamoradlas.
PEDRO: Creo
que Clara será tercera
más fácil.
LAURENCIO: De esa manera,
seguro va mi deseo. 740
PEDRO: Ellas vienen; disimula.
LAURENCIO: Si puede ser en mi mano.
PEDRO: ¡Que ha de poder un cristiano
enamorar una mula!
LAURENCIO: Linda cara y talle tiene. 745
PEDRO: ¡Así fuera el alma!