Los infantes de Carrión piensan casar con las hijas del Cid Ya le besaron las manos y se entran a descansar, manda el rey darles de aquello de que hayan necesidad.
Ahora de los dos infantes de Carrión os quiero habla; en pláticas reservadas y misteriosas están.
“La prosperidad del Cid muy para adelante va, le pediremos sus hijas para con ellas casar, se crecerá nuestra honra y así podremos medrar”.
Y allí con estas razones al rey Alfonso se van.