¡CINCO DE MAYO!

Soñaba ¡oh patria! Napoleón Tercero

Hollarte impune, destrozarte un día,

Y olvidó que en Anáhuac existia

Heróico y noble corazón entero.

Del bravo Cuauhtemoc estóico y fiero,

A la sombra irritada no temía,

Despreciando en su loca villanía

La memoria de Hidalgo y de Guerrero.

Trajo las huestes que llevó con gloria

Doquiera Francia entre el fulgor del rayo,

Dejando inmarcesible su memoria,

Y no halló ni en débiles desmayo

Y vio confuso que grabó la Historia

En su libro inmortal: ¡Cinco de Mayo!