LUCIA.

Lucia de Lammermoor.

En el delirio del amor soñaba

Armonía celeste, arrobadora,

La hermosa diva oir; la soñadora

Era su dulce voz la que escuchaba.

Era ella misma quien así cantaba

Cual ave tierna que á su amado llora;

Cual murmullo de fuente gemidora

Era ella misma la que así lloraba.

Aplauso inmenso, atronador, ferviente,

Desde el vasto salon que está poblado

De séres mil y mil, llega á Lucía:

Brilla la luz en su inspirada frente,

Y mira al despertar, que ha conquistado

El lauro eterno que el artista ansía.