Una Zorra cazando,
De corral en corral iba saltando
Á favor de la noche en una aldea.
Oye al Gallo cantar: «¡maldito sea!»
Agachada, y sin ruido,
Á merced del olfato y del oído,
Marcha, llega, y oliendo á un agujero,
«Éste es», dice; y se cuela al gallinero.
Las aves se alborotan, menos una,
Que estaba en cesta como niño en cuna,
Enferma gravemente.
Mirándola la Zorra astutamente,
La pregunta:—¿Qué es eso, pobrecita?
¿Cuál es tu enfermedad? ¿tienes pepita?
Habla: ¿cómo lo pasas, desdichada?
La enferma le responde apresurada:
—Muy mal me va, señora, en este instante;
Muy bien, si usted se quita de delante.
¡Cuántas veces se vende un enemigo,
Como gato por liebre, por amigo!
Al oír su fingido cumplimiento,
Respondiérale yo para escarmiento:
Muy mal me va, señor, en este instante;
Muy bien, si usted se quita de delante.